Los calentadores de agua son de estos artefactos que no pueden faltar en el hogar. Un calentador puede generar un ambiente confortable en el interior de la casa y proveer de agua caliente sanitaria durante todo el año.
Hoy en día para muchos es impensable no tener un calentador, por eso cuando se avería, pueden ser un dolor de cabeza. Algo clave para que la vida útil de estos se prolongue y estén funcionales por más tiempo, es garantizarles un buen cuidado y mantenimiento.
Tips para el mantenimiento del calentador de agua
El objetivo de todo proceso de mantenimiento es garantizar que el calentador siempre esté a tono y prevenir averías que se puedan estar formando.
Quizás es inevitable que un artefacto presente averías, pero si se detectan oportunamente pueden repararse y evitar que sean más complejas.
El tanque del calentador debe ser drenado de forma continua, al menos cada dos meses, de esta forma se evita que en el interior de este se acumulen residuos que comprometan el buen funcionamiento del artefacto.
Algunos recomiendan que el drenado sea una vez al año, pero esto dependerá de qué tan dura sea el agua de la zona en la que habitas.
Los calentadores de agua suelen tener un ánodo de magnesio, este se ubica dentro del tanque y el objetivo del mismo es mantener el tanque del calentador protegido de la corrosión.
Al menos cada 3 años este ánodo deberá ser cambiado, de lo contrario la vida útil del calentador se reducirá considerablemente.
No ignores un grifo que está presentando fugas, aunque sea mínima. Cuando no es reparada a tiempo esto trae consigo un desperdicio de agua considerable, lo que no es positivo ni para el planeta, ni para tu bolsillo.
Cuando se tiene en casa un calentador de agua a gas, por seguridad se recomienda que la válvula de suministro de gas sea cerrada mientras el calentador no se esté usando. Si se trata de calentadores eléctricos, debe desconectarse la línea eléctrica que lo alimenta.
Es fundamental hacer comprobaciones de la válvula de alivio del calentador, ya que cuando se acumula demasiada presión e incluso demasiado calor, el tanque puede comenzar a presentar grietas.
Ajusta correctamente el termostato. La temperatura debería estar a unos 120ºF o 49ºC. Incluso puedes disminuirla un poco, de hecho por cada 10 de temperatura que disminuyas en el termostato del calentador, ahorrarás hasta un 5% en tu factura eléctrica.
Por lo general, los calentadores de gas se instalan en el exterior, esto para garantizar la seguridad de todos, es importante que te asegures que el sitio donde sea instalado esté protegido, es decir, que cuente con un techo.
La incidencia continua y directa de la radiación solar sobre el calentador, puede comprometer algunas piezas de este.
Todas las instalaciones asociadas al calentador de agua deberían ser revisadas dos veces al año, cada 6 meses. No importa si se trata de un calentador eléctrico o a gas, esto con el objetivo de detectar cualquier problema o avería que se pueda estar gestando.
Los mantenimientos preventivos del calentador deberían ser realizados por técnicos cualificados, pues estos tendrán la preparación necesaria para hacer una reparación, si se necesita.
¿Cómo puedo drenar el calentador de agua?
Uno de los principales cuidados de los calentadores es drenar el tanque cada dos meses, como ya explicamos anteriormente. Con esto se busca que en el tanque no se produzca la acumulación de sedimentos, por fortuna este tipo de cuidados los puedes llevar a cabo por ti mismo, solo sigue los pasos a continuación:
Lo primero es cerrar la válvula de suministro del calentador.
Si se trata de un calentador de agua eléctrico, es fundamental apagarlo previamente, cortar el suministro eléctrico. Esto es clave o tu calentador podría quemarse, en los calentadores de gas también debes cerrar el suministro de este.
Hecho esto, continua con tus actividades cotidianas mientras el agua dentro del calentador se enfríe, esto reduce el riesgo de lesiones. Te recomendamos que los pasos anteriores los realices en la noche, así en la mañana ya el agua estará fría.
En el desagüe del piso del calentador, conecta una manguera, el otro extremo de esta deberá ser conectada a la válvula de drenaje.
Hecho lo anterior, procede a abrir el grifo que tengas más cerca de ti, esto ayudará a que la presión se alivie.
Luego procede a abrir la válvula de drenaje, el proceso para que el tanque se drene por completo podrá durar hasta 30 minutos y dependerá de dos factores, la cantidad de agua y la cantidad de sedimentos que tenga acumulado, así que ten un poco de paciencia.
Abre el suministro de agua del tanque, así comenzará a removerse la suciedad y a drenarse por la válvula de drenaje.
Cuando te percates que el agua que sale del calentador a través de la válvula de drenaje, está limpia, entonces ya habrá quedado completamente limpio.
Retira las mangueras que habías conectado y abre el suministro de agua para rellenar el tanque. Cuando esté lleno, solo vuelve a encenderlo y deja que el agua se caliente.
¿Cuál es la importancia de hacer mantenimiento continuo al calentador de agua?
Los mantenimientos preventivos de los calentadores son claves para prolongar la vida útil de estos, además de que garantizan el óptimo funcionamiento de dichos artefactos.
La importancia del mantenimiento radica en que se pueden detectar averías como fugas, problemas con el ánodo de magnesio, e incluso se previene fugas de gas, ya que el mantenimiento abarca todas las instalaciones del calentador.
Si habitas en una zona donde el agua es dura, es probable que las sales se acumulen en el tanque y las tuberías. Cuando no se hace mantenimiento, entonces el calentador comenzará a presentar atascos y pérdidas de presión.
En resumen, si quieres tener un calentador de gas a tono, que no se averíe cuando más lo necesites y que no represente una amenaza para los miembros de la familia, es necesario ofrecerle el mantenimiento correcto y oportuno.